Tengo que admitir que estoy absolutamente en contra de la vídeoconferencia. A quien le importa (como decía Alaska), saber si estamos en pijama a las 2 de la tarde o si las alergias han convertido nuestros ojos en dos tomates maduros. La webcam es un fenómeno que sólo ha traído quebraderos de cabeza, a los que como yo les gusta simplemente hablar por teléfono sin que nadie tenga porque saber su situación ni aspecto. Para los que no les gusta, pero que por el motivo que sea tienen que utilizarla, tal vez con el «Magic Mirror Cam» que traducido es algo así como «el espejo mágico con cámara», les resulte más fácil sentirse atractivos mientras hablan.  El Magic Mirror Cam es como un espejo en miniatura, copia de los que podemos ver en los camerinos de las grandes estrellas cinematográficas. Es redondo y está rodeado por 24 bombillas LED. Y … Read entire article »